Por circunstancias que no vienen al caso se nos había hecho imposible salir de ruta el sábado, con lo que las tremendas ganas de rutear en moto invadieron nuestro ser más profundo y madrugamos el Domingo para disfrutar de algunos de los tesoros paisajísticos más reconocidos de Asturias y León.
Con un título tan sugerente como el que le puse a esta crónica, ya habréis adivinado que la ruta no defrauda ni un ápice, asique a ver si soy capar de relejar aquí las maravillosas sensaciones que siempre nos transmiten estos paraísos que hoy protagonizan nuestra ruta.
EN MOTO ENTRE PONGA Y RIAÑO, RUTA POR EL SILENCIO VERDE ENTRE CURVAS Y HORIZONTES
La ruta circular que había preparado era bastante exigente en lo que al tiempo se refiere,
Por lo que el madrugón fue importante, pues el punto de inicio de nuestra ruta de hoy distaba de nuestro centro de operaciones unos 250 kilómetros, asique en La Magdalena hubo que detener la marcha para cargar energías para lo que se venía:
Como necesitábamos ganar algo de tiempo, en La Magdalena cogimos la autopista AP-66 para ir a toda mecha y del tirón hasta Asturias, atravesando así el espectacular entorno del embalse de Los Barrios de Luna desde su conocido puente colgante:
Es algo inusual en nosotros, esto de ir por la autopista, pero en ocasiones como esta es necesario hacerlo para llegar en tiempo y forma al punto de inicio de la ruta.
Aquí, desde el puente "Ingeniero Carlos Fernández Casado", se disfruta de amplias vistas del embalse y su magnífico entorno que conocemos muy bien:
Como curiosidad y a título informativo, diré que se construyó en 1983 sobre este embalse de Barrios de Luna y en su momento ostentó el récord mundial de mayor luz atirantada, con una distancia entre sus pilares de 440 metros.
¿¿Colosal obra de ingeniería para aquel entonces, no??
En esta visión aérea del conjunto atirantado acompañado del magnífico entorno que lo rodea, vemos lo asombrosamente bien que encaja en el encuadre esta mole de hormigón que en su momento abrió algunas heridas entre las gentes del lugar:
Y remato con esta bonita postal de época con la prueba de resistencia en construcción, donde lo vemos a rebosar de camiones en sus cuatro carriles con una grúa de construcción al fondo aún:
Pero basta ya de irme por los Cerros de Úbeda...
El tema es que tras atravesar la montaña por el extenso túnel de "El Negrón", nos plantamos en Asturias ya en un periquete, desviándonos después por "la minera" en Mieres,
abandonándola más después en Pola de Siero para ya ir conduciendo por los paisajes y poblaciones que nos va enseñando la N-634, y más adelante, dejando atrás la localidad de Sebares,
nos introducimos en la carreterina que estábamos buscando, la AS-339,
que nos recibe de esta guisa,
¿¿Apetecible, no??
Maravillosa rutilla paisajística que nos condujo hasta este punto, pero el que no conozca el concejo de Ponga, no sabe aún lo que es capaz de ofrecer al viajero a su paso por su territorio....
Nosotros, afortunadamente lo hemos recorrido en innumerables ocasiones, por lo que de las 20.533 hectáreas que abarca este precioso Parque natural, he seleccionado mi ruta personal, que incluso habiéndola realizado más veces,
nos sorprendió casi por igual que a cualquiera que rodara por primera vez por estos suelos.
Vamos a dar comienzo aquí al disfrute paisajístico total por el
PARQUE NATURAL DE PONGA:
Estamos en la puerta de entrada al concejo de Ponga y puerta de entrada también al magnífico Parque Natural homónimo, como nos anuncian los carteles que ahora nos están dando la bienvenida.
Este especial enclave se encuentra nada más y nada menos que entre el espectacular Parque Nacional de Los Picos de Europa y el Parque Natural de Redes, quedando este Parque Natural que hoy nos ocupa,
como un fantástico rincón para disfrutar de su exuberante naturaleza, que aflora como si de una selva tropical se tratara, un sin fin de rutas senderistas y sus paisajes de cuento...
Ya que estamos aquí, me apetece acercarme a saludar a estos pobladores tan peculiares que saben muy bien cómo disfrutar de los ricos pastos que estas montañas les proporcionan..
Me llamaban el hombre que susurraba a los caballos 😆 pero yo no olía a alfalfa asique, a otra cosa mariposa...
Estamos exactamente en este alto llamado COLLADA MOANDI, a 665 metros de altitud, y hace de frontera natural entre los concejos de Ponga y el de Piloña, del que venimos desde Sebares.
Este alto es una encrucijada en la que tradicionalmente el pastoreo tenía sus cabezas por aquí, con lo que vemos sendos senderos que emergen a ambos lados de la carretera que nos ha hecho coronar este pequeño puerto.
Es momento ahora de subirme a la moto....
... Y cagarla...
Un descuido al moverla con una piedra del camino me hizo perder la verticalidad, pero aprovecho el perfecto encuadre existente para mostrar a los equinos que hacen gala de su indiferencia ante tal asunto de estado...
Desde la perspectiva opuesta vemos la pista que asciende a la braña de Fontecha, que es hacia donde vamos a subir a continuación, pues las vistas son de lo mejor de Ponga y Mari no tiene el placer de conocer ese bello rincón,
pero lo primero es lo primero y me tiene que ayudar a levantar al elefante este, que encima está bien tumbado por no traer hoy las maletas laterales...
Dicho y hecho, estamos cachas y eso se nota, con lo que acto seguido metí primera y arranqué monte arriba buscando esto, GUAU!!!
Habremos ascendido hasta los 800 metros de altitud, calculo yo, y las vistas panorámicas de todas las cumbres que coronan este salvaje Parque Natural junto con sus verdes valles no dejan lugar a la indiferencia.
Antiguamente estos caminos eran funcionales para desplazarse de aldea en aldea y por supuesto para hacer más sencilla la labor del cuidado del ganado,
pero hoy en día, además, es un enclave ideal para disfrutar de la naturaleza, observar la fauna salvaje y por supuesto, contemplar este paisaje típico Asturiano en su máximo esplendor,
y como colofón, si llegas en moto hasta aquí ya es una explosión de sensaciones.
Abrir esta panorámica si queréis saber lo que es bueno:
Aquí Mari me cazó colocando el teléfono en modo automático para realizar el siguiente disparo...
Resultado del cual nos queda esta bonita foto de recuerdo para nuestro álbum de rutas familiar:
Es imposible que no me venga a la memoria mi amigo Xoxenel, trailero asturiano muy conocido en la tierrina, pues hace la friolera de diez años me enseñó este y otros rincones de su querida Asturias junto con otros colegas del foro África Twin.
Un saludo para ti, Xoxenel, allá donde estés...
Encarrilamos el camino de vuelta al asfalto y continuamos ruta:
Encaramos ahora la bajada opuesta del puerto de la Collada Moandi, muy apreciada por los aficionados al ciclismo,
pues esta vertiente no es muy larga pero sí muy exigente en algunos puntos, pero muy agradecida en lo paisajístico, ahora veréis...
Llegamos ahora al MIRADOR DE CAZO:
Sin ninguna duda, me considero en condiciones de afirmar que el Parque Natural de Ponga es uno de los mejores rincones por los que motear en Asturias, pues sus carreterillas, de momento en buen estado, transcurren literalmente por paraísos como este que nos muestra este mirador.
Impresionantes vistas hacia el pueblo de Cazo, que luce así de imponente en este entorno privilegiado, se muestra como un lienzo en un día como el que tenemos hoy, sumidos en una tranquilidad pasmosa, y eso teniendo en cuenta que Cazo está a tan sólo 19 kilómetros de la abarrotada y saturada villa de Cangas de Onís!!!
A pie de carretera y bien a mano, me parecería un pecado capital no detenernos a contemplar la privilegiada ubicación de Cazo, no cuesta nada admirar todo este conjunto,
y mirando la siguiente fotografía, comprobamos que, incluso desde aquí, las vistas son fabulosas.
Es bueno simplemente el admirar el entorno que nos rodea en cada kilómetro que recorremos por este Parque Natural, siendo conscientes de lo afortunados que somos por tener estos paraísos a nuestro alcance, a tan sólo tres horas de casa.
Cruzamos el pueblo de Cazo, que literalmente todo él es un buen mirador y un importante desgaste calórico para los aficionados al ciclismo que suben a la Collada Moandi por esta vertiente, pues las subidas son de agarrarse bien al manillar...
Al pasar Cazo, en una buena curva me salgo a la PO-6 dirección Ambingue, para poco antes de entrar al pueblo disfrutar de las vistas que nos brinda su mirador homónimo,
MIRADOR DE LA SEU DE AMBINGUE:
Mirando alrededor, desde este punto se divisan el Picu Pierzo, la Pica Pondiu y la Trapa en Semeldón, la verdad es que este mirador también es de los buenos...
Mirando a la izquierda esquivando la visión de la torre del tendido eléctrico, que por cierto sale en primer plano en el panel informativo, divisamos el pueblo que acabamos de cruzar, Cazo,
ahí como colocado a drede entre el praderío montañoso que caracteriza a este concejo.
A Mari le gustaban las florecillas que adornaban los confines del mirador y no hizo malas capturas no...
Ahora seguimos por la AS-261 por el valle del Ponga, paralelos a éste un buen rato, hasta que unos kilómetros antes de Cadenaba, la carretera se bifurca y nuestra ruta sigue su curso por la carretera de Abiegos, la denominada PO-3, por la que llevaba sin pasar desde 2018.
La he llamado carretera por educación, pues yo estudié en un colegio de curas y soy un chico muy comedido, 😇
pero la realidad de este acceso al pueblo de Abiegos y después a Sobrefoz, es que es un verdadero "camino de cabras" que lleva sin mantenimiento más de treinta años.
Durante este corto trayecto es cuando nos damos cuenta de que el amortiguador Hagon de la Varadero ya ha dado lo mejor de sí,
pero al menos esta travesía nos viene sumergiendo en un verdadero festival de olores y colores a través de esta angosta carreterucha que nos coloca justamente aquí,
donde nos congregamos más de 30 amigos que nos juntamos en aquella xuntanza del club África Twin en Mayo de 2018.
Me encanta este entorno y esta preciosa postal:
Impresionante lugar a que sí !!!
Mari se va encantada de este bello rincón con su frondoso y montañoso entorno.
Pero debemos continuar, son las 12:15 de la mañana y nos queda mucho por ver.
Durante un tramo circulamos bajo esas altas paredes calizas que a la vista parece que las cortaron a machete para la construcción de este camino de acceso, seguramente no hace más de un siglo...
Llegamos a la aldea de Sobrefoz, poblado que tiene su origen en época prerromana, como así lo demuestran la espada y el puñal de la edad de bronce encontrados aquí.
Es un pueblo bonito, por el que un día paseé y disfruté de su arquitectura tradicional y de su bar en la plaza del pueblo, pero hoy tengo otros planes, asique continuamos ruta, ahora ya, con muy buen firme desde Sobrefoz.
La nueva carretera que sale de aquí es la PO-1, esta ya con un firme contemporáneo que nos lleva disfrutando hasta el siguiente mirador anotado en mi libreta de paradas obligadas, y no es para menos, pues estamos en el
MIRADOR DE PEÑA SOBERU:
Impresionante mirador desde el que contemplamos hacia este lado el valle del río Ponga con los bosques que lo adornan todo aquí, por lo que no es de extrañar que a Ponga se le llame "el edén Asturiano":
Girando la cabeza hacia el lado opuesto destaca, además de la bonita sonrisa de Mari, la cumbre del pico Tiatordos, con sus 1951 metros de altura,
protagonista de numerosas rutas de senderismo que os llevarán hasta su cumbre gracias a la ruta que sale desde la localidad de Taranes con un recorrido de unos 15 kilómetros y un desnivel acumulado de unos 1600 metros, casi nada oiga...
Pues con las vistas que nos regala este mirador desde su ubicación, aquí junto a la carretera, no imagino las tremendas y amplias panorámicas que desde la cima del Tiatordos podríamos disfrutar....
Para proseguir nuestra ruta hacia San Juan de Beleño, la carretera ahora atraviesa las peñas de cuajo, sin miramiento, en estos valles nuestros antepasado lo tuvieron crudo para agilizar las comunicaciones...
No zigzagueamos mucho por esta maravilla de rutilla hasta llegar a las inmediaciones de San Juan de Beleño, donde nos recibe otro mirador en el camino con preciosas vistas hacia la citada población,
si es que esto es un no parar, o un sin vivir, pero viviéndolo todo de la mejor de las maneras, ruteando por el paraíso en moto...
MIRADOR DEL TOMBU LA ESPINERA:
Continué sin dilación hasta otro de los puntos en altura más bonitos del Parque Natural de Ponga, con una excelente ubicación para disfrutar de Ponga y sus rocosos vecinos los Picos de Europa, pero vayamos por partes...
Llegamos al praderío verde esmeralda que iluminado por este azul celeste hace de la llegada aquí una experiencia embriagadora.
Esta bonita explanada se llama LA COLLADA DE LES BEDULES, y desde siempre se acondicionó como aparcamiento para los vehículos,
nos deja a la vista esta pista y su horrible pasarela con la piruleta al fondo con la prohibición pertinente, que hoy nos obliga a caminar unos pocos minutos para poder disfrutar del mirador...
Cosa que no ocurrió hace unos años, pues a pesar de las lluvias que convirtieron la tierra en barro, la Varadero y yo llegamos a los pies del mirador para disfrutar de sus bondades, que dicho sea de paso, no fueron tan gratas como las que tendremos esta soleada mañana.
Aunque en los mapas sólo se le conoce con el nombre de MIRADOR DE LA COLLADA, este extraordinario lugar lleva el conocido nombre de
MIRADOR DE LES BEDULES.
Aquí según el panel, estamos en el mirador de La Collada que nos muestra esta impactante cadena montañosa que vigila Ponga desde arriba,
destacando ese pico puntiagudo a la izquierda de la imagen llamado el Pico Recuenco y en el centro el siempre imponente Tiatordos, que ya vimos desde su otra vertiente hace un rato:
Esta pasarela nos lleva al lado opuesto, donde se ve al final de ésta el MIRADOR DE LES BEDULES con las magníficas vistas que nos regala al frente.
Los paneles nos van ilustrando sobre el entorno que vamos viendo, ubicando los innumerables picos que nos rodean,
aunque llaman la atención los limítrofes e impresionantes Picos de Europa que nos saludan desde su macizo oriental y también el Parque de Redes.
Este mirador dejará fascinado al más exigente si se visita en un día despejado como el que tenemos la suerte de disfrutar hoy...
Desde la explanada del parking, tiene su salida la ruta senderista a un magnífico bosque de hayas, con un recorrido apto para disfrute familiar por una pista forestal para disfrutar del Bosque de Peloño,
que es uno de los bosques de hayas más grandes y mejor conservados de España, asique anotarlo...
Ya sólo por la carretera para llegar hasta aquí y las vistazas desde los miradores de Les Bedules, ya habrá merecido la pena llegar hasta aquí,
ya tendrás la sensación de que el día está amortizado para bien, pero ahora queda la bajada, porque la ruta restante nos llevará por la localidad de Viego y después a cruzar el desfiladero de Santagustia con la correspondiente ración de disfrute.
Esta carretera que nos lleva conduciendo por estos paraísos despoblados, con poco o nulo tráfico, que nos hizo pasar por la carretera sobrevolando sobre el desfiladero de Santagustia,
finalmente va a morir deleitándonos con un vertiginoso descenso hasta llegar a un archiconocido rincón del Parque Natural de Ponga, PUENTE VIDOSA, en el Desfiladero de Los Beyos,
que vemos en la siguiente fotografía panorámica con la cascada de Aguasalio, con más de 20 metros de caída, aunque en la foto no se aprecie...
Como casi todo quisqui sabe, Puente Vidosa es un centro multiaventura ubicado en el corazón del desfiladero de Los Beyos, en este enclave único que lo hace tan especial.
Se trata de uno de los parques de aventura más completos de España, tanto por tamaño como por sus instalaciones, ya que disponen de vías ferratas, tirolinas, 4 puentes tibetanos diferentes y zonas preparadas para la práctica de escalada, por eso es difícil encontrar este enclave con poca gente...
Justo al lado de esa pasarela que lleva a la multiaventura, una vieja casona se ha transformado hace muchos años en un mítico hotel junto a la cascada,
ubicado entre las altas paredes de este famoso desfiladero y que siendo ya la hora de comer hará de este rato un paréntesis de disfrute culinario para nosotros.
Como viene siendo habitual en Asturias, esperamos la llegada de la comanda a nuestra mesa disfrutando en la terraza de unos buenos culines de sidra:
Lo bueno no se hizo esperar mucho, Mari fue cauta en la elección de su primer plato para dejar sitio al segundo, pero yo venía con las ganas de catar una buena fabada Asturiana y así lo hice, aunque después me acordé toda la tarde...😅
Los segundos fueron unos cachopines con patatas, algo típico también, que junto a los postres y los cafés nos dejaron con unas ganas de siesta terribles...
Pero no estábamos por la labor de hacer una asentada en cualquier esquina, no, ahora tocaba desviarse de la N-625 que atraviesa el desfiladero de Los Beyos para introducirnos en otro pequeño cañón, el que había formado el río Viboli con paciencia durante milenios, fijarse:
Se trata de una travesía entre gigantescos muros de roca y que tan sólo tienen una escapatoria, hacia el cielo...
Y es precisamente hacia donde nos queremos dirigir ahora Mari y yo en estos momentos.
Comenzamos la bonita subida hacia la aldea de Casielles.
Hay que desviarse de la carreterilla hacia Viboli girando hacia Casielles,
donde esta serpenteante carreterilla que salva un desnivel de 380 metros en menos de 3 kilómetros con sus 23 curvas de herradura, nos colocará directamente en la parte más alta del pueblo, junto a su capilla.
Así nos lo advertía el GPS:
Esta subida tan enrevesada y retorcida para conseguir tanta elevación en tan poca distancia, le ha valido a este tramo para ganarse el apodo de "el Stelvio Asturiano",
Aunque para ser justos, no se parecen en nada, pues estas curvas de herradura tan cerradas y estrechas requieren de la máxima destreza y concentración de los que llevamos motos grandes y pesadas,
aunque hay que reconocer que esta subida hace del recorrido un paseo por un espectáculo natural que siempre impresiona...
También he leído por ahí que a este corto recorrido le llaman el pequeño Alpe D´Huez, pero hace años que vengo por aquí y nunca lo había escuchado.
Una vez arriba, el punto más alto es este junto a la vieja ermita...
Casielles puede presumir de que tiene unas vistas de escándalo, pero lo que mucha gente no sabe es que desde este punto aún se pueden mejorar las vistas, y mucho !!!
Esta colina que tenemos frente a la moto esconde otro de los mejores miradores del Parque Natural de Ponga, y vamos a disfrutarlo con este día tan soleado y despejado, pues en anteriores ocasiones no gozamos de estos privilegios.
Comenzamos la subida a la colina en cuestión...
Ponga es uno de los grandes tesoros de la cordillera cantábrica, con su relieve de majestuosos cordales entre los que se encajan profundos desfiladeros como el de Los Beyos, que tenemos ahí delante encajonado al fondo de lo que estamos viendo. (click en la siguiente panorámica please...)
Estamos en un rincón poco conocido, o eso me parece a mí, pues cada vez que lo comento con alguien, nadie lo conoce,
se limitan a llegar hasta la ermita con la moto y vuelta para abajo, lo que me parece literalmente un desperdicio el dejar este rincón sin disfrutar.
Pues como cada vez que aquí estuvimos, lo hemos disfrutado en total tranquilidad, sin la afluencia que caracteriza al desfiladero de Los Beyos, que tenemos a tan sólo unos pocos minutos.
Bajamos la colina y montamos en la moto para encarar la bajada, que no desmerece absolutamente nada a la subida,
pues ahora nos queda todo este espectáculo panorámico para disfrutarlo sin forzar, y agradeciendo que arreglaron el firme, pues esta retorcida subida,
hace unos años era un camino de cabras repleto de baches y gravilla como el tramo de la PO-3 que antes cruzamos hacia Sobrefoz.
Cada curva de las 23, un escaparate increíble, es una pasada hacer esta ruta en un día tan fantástico !!
De nuevo miro al "Tonto", como le llama mi amigo Manolo, y me encanta ver la pantalla cargada de zetas en casi todas sus pulgadas:
Ahora abajo le dedicamos algo más de tiempo para tirar alguna foto, pues este encajonamiento junto al riachuelo bien lo merece:
Aquí este pequeño afluente del río Sella nos dibujó estos semi túneles que aparte de dejar algún desprendimiento en la calzada,
hace, que cruzar estos estrechos en moto sea bastante placentero a la vista, a la par que una experiencia muy enriquecedora.
Mirar qué estampa:
Ahora sí, nos metemos de lleno en el desfiladero de Los Beyos, espectacular cicatriz abierta por el río Sella, que discurre entre espectaculares paredes y paisajes durante la friolera distancia de 12 kilómetros,
discurriendo entre altos paredones de gran altura, comenzando entre el caserío de Rañes en Amieva y la venta de Cobarcil, en Sajambre, ya en territorio Leonés, donde se abre en grandes espacios que hacen alucinar también al personal.
Es un hecho que el que no haya cruzado este desfiladero alguna vez, no puede presumir de que conoce Asturias
Aquí también entramos en otro de los paraísos de nuestro país, el Parque Natural de Picos de Europa.
Aquí ya cruzamos a la provincia de León y vamos a disfrutar de la subida de otro de los puertos míticos que cada semana se colapsan de ciclistas, motoristas y demás fauna viajera que plaga todo este territorio hasta la extrema saturación
Lo que sigue ahora es el disfrute de la subida hacia el puerto El Pontón, el que separa las provincias de Asturias con León, pero no en su cota más alta, sino aquí abajo, en el punto de la foto anterior.
Puerto archiconocido y masificado en fines de semana por motoristas de todas partes y campers de toda índole, que si le sumamos los aficionados al ciclismo y domingueros varios, puede enmascarar bastante la sensación de disfrute general, pero en fin, todos tenemos derecho a disfrutar del paraíso...
Este puerto es de pendientes suaves y largas, con algunas curvitas de las buenas y sobre todo, mejores vistas, con lo que nos dedicamos a disfrutar de la subida sin detenernos a disparar ninguna foto hasta llegar al cartel de puerto:
Desde este momento nuestra ruta sigue, ya en su totalidad por nuestra provincia de León y vamos bajando dirección a Riaño por la N-625, pero pasando Vagacerneja,
le quería mostrar a Mari un rinconcillo con mucho encanto que descubrí hace años y nunca la había traído.
Se trata del cauce del río Orza que discurre por estas praderas y contribuye al llenado del embalse de Riaño:
La verdad es que es una sensación extraña conducir por la vieja carretera que sepultó el embalse viendo como ahí delante se pierde hacia el fondo...
Este rincón lo utilicé en el pasado para darme un chapuzón tranquilo un día de verano y no se puede negar que aquí quedan unas fotografías especialmente peculiares:
A ella también le gustó el momento y el encuadre y así de guapa quedó sobre la moto:
Estos momentos de tranquilidad absoluta que aprovechamos bien un buen rato contrastaban con la carretera N-625 que pasaba al lado cargada de tráfico hasta los topes...
Photo phinish y salimos de allí.
Aquí vemos el fantasma de un bonito puente, EL PUENTE DE LA VEGA, llamado así por la ubicación en la que está construido, la Vega de Riaño.
La verdad es que resulta algo tétrico ver el pasado emerger de esta manera, pero no se puede negar que es una sensación indescriptible,
que ya sentimos en su día elevado a la enésima potencia cuando visitamos el pueblo sumergido de Aceredo. (Crónica AQUÍ)
Sin demora, llegamos ahora a Riaño, el bello Riaño que hace de puerta de entrada a los magníficos Picos de Europa.
Qué maravillosa estampa nos ofrece siempre al llegar, me encanta !!
Riaño puede presumir del entorno que lo rodea y por ello se ha convertido en un icono del turismo, si hablamos de motos, por aquí pasan todas los fines de semana, es brutal...
Foto con sus letronas:
Justo por encima de las conocidas letronas, Riaño presume de tener el que han llamado "EL BANCO MÁS BONITO DE LEÓN",
que a la vista está que con sus preciosas vistas hacia los "fiordos leoneses" nos llenaron de calma y sosiego aquellos minutos:
Tiene también en la cima de la colina donde se ubica el camping unos miradores y un columpio como reclamo turístico.
Ni que decir tiene que las vistas desde este promontorio son exquisitas:
Justo enfrente del mirador de la foto anterior, tienen uno de los columpios más altos del país, cosa que no me emociona especialmente,
pero sí las vistas que nos regala a ambos lados, por cierto, que nos sobrará tiempo para disfrutarlas si esperamos las largas colas que siempre hay aquí.
Yo aquel día juré y perjuré que no volvería a hacer cola aquí, he dicho.
Junto al columpio también está Jeidi, pero con "J", porque es Jeidi "la de León" y su perro Chitu, que con todo este conjunto hacen un estupendo reclamo turístico.
Aquí, desde el mirador Alto Valcayo, las vistas opuestas son de escándalo y dan rienda suelta al amor...😍
Riaño reúne a las dos poblaciones, el Riaño viejo, primera población que data al menos del año 1752, demolido en julio de 1987 por la construcción de este embalse, (adjunto esta bonita foto de la época dorada del viejo Riaño)
y el Nuevo Riaño,
urbanizado a partir de 1980 en el paraje que lo vemos hoy para acoger a los vecinos afectados por las expropiaciones acontecidas por la inundación en su momento.
Lo que está claro es que Riaño ha sabido reinventarse, por ejemplo tiene multitud de actividades acuáticas y un bonito puerto deportivo con vistas:
Con vistas a los "Fiordos Leoneses" desde donde se coge el barco que nos lleva de crucero por estos paisajes puntiagudos.
Aquí una instantánea de la última vez que hicimos ese crucero por el embalse:
Como curiosidad, a mí me gusta bajar hasta la base de la presa del embalse, con nombre "La Remolina",
que desde el 31 de Diciembre de 1987 dejó bajo las aguas del Esla a nueve pueblos sacrificados para llevar el riego a las 84.000 hectáreas de los páramos castellanos y leoneses de Tierra de Campos.
No muy distante de este punto está un pueblo de montaña bastante peculiar, algo así como su nombre, se llama LOIS,
sí, como los jeans, pero tan sólo con recorrer la pista asfaltada que te lleva hasta él, ya habrá merecido la pena el desplazamiento, menudos paisajes acompañan el camino
Hasta que este cartel nos da la bienvenida con el monumento que queremos ver asomando al fondo:
Lois es un bonito pueblo de la montaña oriental leonesa que tiene algunas cosillas que ver y esconde algún secreto histórico, pero nosotros queríamos ver lo que han llamado
"LA CATEDRAL DE LA MONTAÑA",
este precioso mamotreto construido en mármol blanco que por su color y su impresionante tamaño le han dado fama reconocida.
Mandada construir por Don Juan Manuel Rodríguez Castañón en 1758, es el principal reclamo de Lois, aunque sus restaurantes también atraen a bastante gente, nosotros una ocasión así lo hicimos.
Como buen pueblo de montaña no le podían faltar sendas fuentes manando aguas cristalinas casi recién salidas de la tierra.
Volvemos atrás pasando de nuevo Riaño y tomando ahora la carretera CL-635 que comunica Riaño con el Puerto de Tarna
para detenernos en otro reclamo turístico que ha tenido también mucho éxito, no sólo por sí mismo, sino por el paisaje que lo rodea también...
EL BANCO MÁS GRANDE DE LEÓN
El banco da la espalda al valle y a la cola del embalse de Riaño, pero el máximo exponente de este fantástico encuadre lo pone la silueta del pico Burín como telón de fondo.
Sus 4 metros de altura hacen que parezcamos pigmeos cuando nos sentamos en sus tablones, pero los de Burón lo han conseguido,
este lugar siempre está abarrotado de visitantes, nos vamos que llegan dos coches...
Pero la cosa no se queda ahí, en el pueblo de al lado llamado Lario, no han esperado a ninguna subvención institucional para crear un reclamo para el pueblo,
sino que rescataron un viejo roble de 200 años de edad y que llevaba tirado en el monte otros 20 y motosierra en mano crearon este
TRACTOR GIGANTE DE LARIO:
Una pedazo obra artesanal aprovechando esa madera que ahora llama la atención de todo aquel que pase por el pueblo, pues lo han colocado en la travesía general.
La verdad es que no le falta detalle a esta peculiar escultura, a los que peinamos ya algunas canas, nos recuerda al troncomóvil de Pedro Picapiedra, salvando las distancias pertinentes, claro...
Sobre cuatro toneladas de madera tenemos aquí dando forma a este "troncomóvil" que, dicho sea de paso, tiene detrás una fuente que mana unas aguas fresquísimas que me encanta probar cada vez que paso por aquí.
Pero en Lario se han currado otros rincones para que los visitantes los busquemos, asique haciendo caso al cartel que estaba junto al tractor que decía:
"Si quieres ver el banco más bonito de Lario, sigue las madreñas".
Pues comenzamos..
Pero por más que le preguntamos a esta pareja que andaba por allí, no soltaron prenda y nos tocó seguir investigando la ruta...
Pasamos a cruzar varias praderas con la hierba ya segada y hecha rollos...
Donde por supuesto hubo que inmortalizar el momento, porque esto se trata de disfrutar de cada momento y lugar al que nuestra querida pelirroja nos acerca.
Nada, que el rollo no se movía nada oiga...
Y mira que lo intenté, pero nada, declino esta operación entonces...
Después hubo que continuar con la búsqueda de madreñas, que nos iban marcando la ruta a seguir, en este caso enmarcada en el tronco de un árbol:
Hasta que llegamos aquí, al merendero del pueblo, por donde pasa el cauce del Esla y nos han confeccionado un espacio para la relajación bajo el cobijo de la sombra que dan estos árboles, además del puente colgante habilitado para cruzar al otro lado:
Junto al puente colgante y alguna mesa merendero, aparece junto a las aguas el
BANCO MÁS BONITO DE LARIO,
bonito y relajado rincón, sin duda, en el que detenerse a descansar escuchando el murmullo del Esla al pasar junto a nosotros....
Esta bonita frase cuelga del árbol que está junto al banco:
"Si pasas el río no bebas el agua, que los mis amores son de la montaña"
Un buen rato de relax en aquella sombra nos hizo refrescarnos del calor que nos azotaba y recargar baterías para continuar con nuestra ruta, que aún nos queda bastante...
Antes, al ir a enredar con los rollos de hierba habíamos visto esta caseta puesta aquí a modo de biblioteca en la naturaleza, y es que la caseta está repleta de libros con la intención de que la gente se siente a leer o quizás se lleve un libro y deje otro en su lugar:
A este lugar lo han llamado "EL RINCÓN DE LAS LETRAS", y la verdad es que invita a detenerse a disfrutar de una lectura en este banco habilitado para tal fin:
Me cago en la leche,
Voy a tener que acostumbrarme a llevar conmigo las gafas de cerca, recórcholis !!!
Eso sí, de paso puedo pedalear un rato...
Impresionantes esos rincones que nos ha dedicado el pueblo de Lario, nos han encantado.
Ahora la ruta continúa hacia el conocido PUERTO DE TARNA, importante enclave que hace frontera con Asturias al que se le puede llamar la puerta del Parque Natural de Redes, donde nace el río Nalón aquí al lado y desde los años ´70 a la década de los ´90 disponía de una pequeña estación de esquí.
Pero no cruzaremos hoy a Asturias por aquí, eso quedará para otra ruta.
Al coronar esta cumbre cantábrica nosotros giraremos a la izquierda, cogiendo la LE-333 recién asfaltada por fin, que nos adentrará en otra maravilla paisajística...
Esta serpenteante y paisajística carreterina leonesa nos llevaba en un moderado pero continuo ascenso, con paisajes como este adornando todo el trayecto:
Sí, estamos en el PUERTO DE LAS SEÑALES.
Si en Tarna estábamos a 1490 metros de altitud, en Las Señales hemos subido hasta los 1625 metros, lo que significa que aquí los inviernos son potentes con nevadas fuertes, que estropearon hasta convertir en un camino de cabras la carretera, que afortunadamente, y tras años solicitándolo, se ha asfaltado.
¡¡Viva el vino !!
La bajada por la LE-333 hasta Puebla de Lillo es un espectáculo de verdor, bosque muy poblado y montaña, ruta que recomiendo hacer al que no lo haya hecho aún.
Estamos ya en el municipio de Boñar y aquí se halla el tercer embalse más grande de la provincia de León, después del de Riaño con el Esla y el de Bárcena en El Bierzo, con el Sil,
EL EMBALSE DEL PORMA,
que nos disponemos a bordear por la carretera que lo circunda y que no tiene desperdicio alguno, pues nos va mostrando vistas espectaculares del entorno y varios miradores que acompañan la ruta.
Aquí me detuve en un apartadero justo antes de llegar al
MIRADOR DE VEGAMIÁN:
Estamos ahora mismo en el MIRADOR DE VEGAMIÁN, que a la vista está que afirmo que es parada obligada si se pasa por aquí, además está junto a la carretera, es casi imposible pasar de largo:
Estamos a unos diez kilómetros de Boñar y a menos de 60 de la capital y este embalse se ubica en una zona muy abierta que facilita la entrada de las corrientes ventosas,
lo que lo hace ideal para la práctica de deportes náuticos, que serían una gozada con estos paisajes periféricos...
La presa tiene 75 metros de altura sobre el cauce original y es capaz de almacenar más de 300 millones de metros cúbicos de agua del río Porma, afluente del Esla.
Este embalse del Porma también se le conoce con el nombre de embalse de Vegamián, en honor a la principal población que quedó anegada por estas aguas.
No muy lejos de aquí, la carretera LE-331 nos coloca en otro mirador de tantos, el
MIRADOR LOS FONTANALES:
Este mirador es el más cercano a las aguas del Porma, se puede apreciar mejor lo inmenso que es y la belleza de sus aguas transparentes flanqueadas por las altas montañas y frondosos bosques.
Como otros embalses que conozco, este también podría perfectamente formar parte de una portada de alguna revista de naturaleza
Me hubiera pegado un baño refrescante en aquel momento, pero el reloj marcaba ya las siete de la tarde y el tiempo apremia.
Lo que sí hicimos fue disfrutar de esta bella estampa con los Picos de Europa al fondo dando a todos estos miradores un toque muy especial.
Dejamos atrás el pueblo de Boñar para desviarnos ahora a la izquierda para llegar al pequeño pueblo de Las Bodas,
que no es gran cosa, pero nos apetecía conocer una reliquia que conservan presidiendo una de sus plazoletas...
Estoy haciendo referencia al
HÓRREO MÁS ANTIGUO DE LEÓN
Este pequeño hórreo que tanta admiración suscita últimamente, está considerado como uno de los hórreos más antiguos de España !!
Y no es de extrañar tanto interés por él, pues la prueba del carbono 14 lo ha datado en el siglo XVII.
Ya fue declarado como Bien de Interés Cultural por la Junta de CyL, título que ya ostentaban otros hórreos de menor antigüedad.
Este hórreo tiene sus diferencias con sus homólogos Asturianos en los tablones horizontales, lo que lo convierten en un ejemplar único entre los más de 300 que tenemos en nuestra provincia.
Restaurado en 2001, fue cedida su propiedad a la Diputación.
Un tesoro etnográfico que ahora preside orgulloso esta bonita plazuela de la localidad leonesa de Las Bodas.
Sea como fuere, a nosotros nos apetecía visitarlo y lo hemos hecho.
No queda nada mal gobernando la plaza con Mari como presidenta, no??😆😅
Es hora de emprender el regreso a casa "por la vía rápida", pero de camino y bastante cerca nos quedaba el pueblo de VEGAQUEMADA,
villa con este peculiar nombre que hace referencia a la antigua práctica de quemar amplias extensiones de terrenos para mejorar la calidad de los próximos cultivos agrícolas,
acción que la bautizó con este nombre propio que figura en los registros desde el año 1266.
Pero no nos detenemos aquí sólo por esa curiosidad, sino para ver de cerca esta iglesia a la que le han puesto el apelativo de
LA CATEDRAL DEL PORMA:
Iglesia esbelta, luminosa y de estilo románico, pese a lo que pudiera parecer, no es muy antigua, sino que colocaron su primera piedra en agosto de 1952 siendo inaugurada dos años después, en Septiembre de 1954.
Por su estructura de imagen catedralicia la llaman La Catedral de La Ribera o más comúnmente conocida como LA CATEDRAL DEL PORMA.
Su torre de planta cuadrada, con cuatro cuerpos, sus dieciocho vanos y una altura de 29 metros, también ayudó a llamarla así.
Pero lo que nos llama más la atención es cuando leemos que la construcción de esta "catedral" la pagaron de su bolsillo Pablo Díez y su esposa Rosario Guerrero.
¿¿¿ Pero quienes eran esta pareja de adineradas gentes???
Pues Pablo estaba directamente ligado a la cervecera Mexicana Modelo, nacido aquí, en Vegaquemada en 1884 y fallecido en Ciudad de México en 1972.
Este gran empresario nunca olvidó su tierra natal, esta iglesia es buen ejemplo de ello, pero no fue el único,
pues algún asfaltado de calles o la llegada del teléfono público, también tuvieron mucho que ver con el cariño que le tienen a esta pareja de emigrantes los vecinos de esta villa, que le han dedicado esta estatua y el nombre de una calle para que no caiga en el olvido.
Pero qué falta le hacían emigrantes como estos a todos nuestros pueblos !!!
Ahora desde aquí teníamos 165 kilómetros hasta casa, ruta que hicimos del tirón con una buena sonrisa dentro de nuestros cascos por el maravilloso trazado de nuestra ruta del día de hoy,
(ruta AQUÍ), atravesando verdaderos paraísos paisajísticos que van a hacer difícil que nos olvidemos de tal edén, que para nosotros fue el PARQUE NATURAL DE PONGA, objetivo principal de nuestra ruta.
Hasta aquí llegó esta crónica recuerdo de esta maravilla de ruta que hicimos hace un año y pico, asique, CHAO BAMBIN@S !!!!














































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